domingo, 17 de febrero de 2013

El estudiante

El estudiante: 
muestra del cine postmoderno latinoamericano

"El estudiante" llega a la escena mundial amparado por prestigiosos premios internacionales (Locarno, Toronto, BAFICI) que le adjudican múltiples cualidades: aborda una temática que había sido dejada de lado por la cinematografía reciente, brinda una visión "realista" del movimiento universitario argentino, sus diálogos son eficaces, su buena dirección de actores, etc.  Sin embargo, ¿qué hay de cierto detrás del aplauso complaciente de críticos de cine y jurados festivaleros? Veamos...

El galán

Lo bueno
* Uso efectivo de la técnica audiovisual, lo que le brinda una textura y una cadencia de documental, contribuyendo así a una sensación de cercanía por parte del espectador.
* Uso de ambientes naturales en situaciones reales (Facultad de Sociales de la UBA en plenas elecciones estudiantiles), lo que acentúa el carácter "objetivo" y de "fiel reflejo de la realidad" del film.
* Buen reparto de actores, con actuaciones sobresalientes (Horacio, Valeria) y en caja (Roque, Lorenzo, Zevallos, Hipólito) que logran disimular las actuaciones menores, por momentos disforzadas y poco creíbles, de Acevedo y Paula.
* Diálogos sencillos, de frases hechas, que los ciudadanos promedio usamos en el cotidiano.

Con la amiga "cariñosa"

Lo malo
A despecho de sus cualidades visuales, el guión del film es, de inicio a fin, una oda al cliché: los "progres" o "zurditos" (izquierdistas y afines) han sido, son y serán gente que va saltando de un partido a otro, es decir, "cambia de camiseta" como de ropa interior. El interés de esta gente no es la justicia, la igualdad, lograr un mundo mejor. No, señores, su interés es el poder, el poder por el poder, el "llegar" (¿a dónde? no se sabe). Y para "llegar" se sirven de todos los métodos que los medios de comunicación y las familias nos han enseñado que usan los izquierdistas: traición, trampa, contubernios, promiscuidad sexual, demagogia, manipulación, intriga, etc., etc., etc.

El film no presenta matices ni múltiples puntos de vista. Toda la trama del provinciano Roque y su espectacular ascenso político vía el conocido método del "braguetazo" en un grupito insulso llamado "Brecha" desemboca en el mensaje que nos vienen repitiendo desde que tenemos uso de razón: "todos esos grupos de izquierda (socialistas, comunistas, etc.) son la misma porquería, todos te quieren usar, todos te quieren controlar la mente". Y a continuación: "por eso no vale la pena comprometerse, uno debe velar por sí mismo; y si te metes, tú también aprovecha. Total, todos ellos te usan, ¿no? Úsalos tú también".

El objeto del deseo

Lo feo
Que nos pretendan dar gato por liebre, es decir, que recurriendo a una técnica audiovisual efectiva y que se vende como "objetiva", nos metan de contrabando la concepción de la Derecha Bruta y Achorada (DBA) que pulula en el tercer planeta: que esos "zurditos", esos "comunistas", que hablan de justicia, honestidad, limpieza, no a la corrupción, etc.; esos, son iguales o peores que el resto, así que no son nadie para reclamar. Nos preguntamos: ¿Tan poca cosa creen que somos los jóvenes? ¿Tan poca capacidad de discernimiento creen que tenemos?

Hay elementos de verdad en el film. Sí, los hay, y los mencionamos a continuación:
* La universidad pública, ninguneada y maltratada por el Estado.
* Los gobiernos de turno buscando enquistarse en las universidades para incrementar su poder y su acceso a dinero sucio (coimas, desviación de fondos, malversación, etc.).
* Grupos estudiantiles de todas las tendencias (derecha, centro y dizque izquierda) que han olvidado sus ideales (si es que alguna vez los tuvieron) y que se prestan al juego de las autoridades corruptas a cambio de ganancias de diverso calibre (becas, viajes al extranjero, cargos, dinero contante y sonante, etc.).
* Mayoría estudiantil sumida en la indiferencia, en la comodidad de la inercia, en el decadentismo, en las relaciones interpersonales superficiales y vacías, en la falta de ideales superiores, en la creencia de que "todos son unos corruptos" y no queda más que acomodarse al corrupto de turno.

Sin embargo, estos elementos de verdad han sido tan sobredimensionados y han sido usados de tal forma que el producto final es un velado y malintencionado ataque al movimiento juvenil universitario latinoamericano y argentino que se forjó en Córdoba a inicios del siglo XX y que, hoy en día, lucha sin descanso por una universidad pública de veras nacional y científica, que responda a las necesidades del pueblo y que esté en función de un plan nacional de desarrollo. Toda esa juventud correcta y con ideales no está representada en una película tan abiertamente tendenciosa como "El estudiante".

Y es que este film "novedoso" y "creativo" no aporta ideas. En él solo hay frases retóricas repetidas machaconamente a lo largo de toda la película y, por si eres tan lento que no las captaste, ahí está el locutor de comercial que te las repite en el momento más oportuno.

El ambiguo final también ha sido señalado como "sorprendente" e "inesperado", que brinda la moraleja de reeducación del protagonista. Nada más lejano de la verdad: las acciones generadas por despecho y por venganza no son ejemplo de reeducación en el camino de la bondad y de la ética. Ese "No" final es por las promesas incumplidas. No es un "No" a lo corrupto, a lo inmoral. Si Acevedo les cumplía, ese "No" nunca se hubiese pronunciado.


Lo ridículo
Los clichés de género del film:

* Roque, el "homo eroticus supermacho" del siglo XXI, que trepa vía el "braguetazo" y que tan bien calza en el dicho popular que repiten los que dicen tenerlas bien puestas: "Le doy a todo lo que tenga falda y se mueva". Y, cómo no, consigue el ideal de mujer que nos han vendido como señal de éxito: bonita y blanca (o blancona, que para el uso da lo mismo), con su toquecito de seudointelectual clasemediera para no desentonar con la tendencia actual. En ese sentido, no tiene pierde la conversación de Roque con su padre al momento en que lo está embarcando en el taxi después de la cena que sostienen con Paula y Acevedo.

* ¿Y las protagonistas mujeres? Impecables. Toditas sacadas del Manual Secreto del Macho Moderno:
+ Más fáciles que sumar 1  más 1 (y es que, ¿quién en su sano juicio se podría resistir a un galán tan guapo y con tanto futuro? $$$).
+ Besan, gimen, y todo lo demás lo hacen igualito de mecánico y sin gusto. Es el macho quien se luce y las satisface a todas, a toda hora y en todo lugar, con un impresionante sistema a prueba de fallos.
+ Todas las mujeres son, incluida la "intelectual de izquierda" (ojo, Camila Vallejo), unas mal disimuladas busconas a la caza de un marido con el cual divertirse y aprovechar un poco o, si se puede, durar hasta que aparezca otro mejor.  Recordemos dos escenas de antología al respecto: la conversación de Roque con el administrador del local para el plenario; y la conversación de Paula, Acevedo y Roque en la discoteca, donde alardean de sus conquistas sexuales.

Los tórtolos después de su primera noche

Concluyamos:
El valor de esta película no reside en lo celebrado por críticos y jurados quienes, en su gran mayoría, aplauden todo aquello que encaje dentro de los burdos estereotipos culturales que difunden los medios de comunicación. En ese sentido, "El estudiante" pone en práctica la "combinación perfecta y exitosa" de la cinematografía que predomina en el mundo: argumento retorcido y complicado (no complejo) en una ciudad latinoamericana, drogas, sexo y traición, todo a modo de documental y en locaciones reales.

Como se había señalado líneas arriba: hay una inmensa población de estudiantes latinoamericanos que no está representada en esta película. Y si están poco representados los centros urbanos, ni qué decir de las ciudades de provincia, donde el contexto sociocultural  está menos alienado y se orienta a intereses menos frívolos de los que obsesionan a los habitantes de ciudades capital como Lima o Buenos Aires.

Entonces, el valor de "El estudiante" reside en que es un excelente indicador de los argumentos que hoy en día esgrime desembozadamente la derecha mundial para intentar neutralizar cualquier germen de cambio, de reforma, y ni qué decir de revolución. Su frase preferida es: "Todos son (o somos) corruptos", y así supuestamente "desarman" a sus adversarios. Bueno, debemos informarles que NO somos corruptos millones de personas, así que no busquen meternos a la fuerza o con engaños en su tacho de basura.


El gurú y su discípulo

"El estudiante": frases para la histeria

"La traición, la más recurrente" 
(el "maquiavélico" Acevedo).

"En política, si te cagan, el boludo sos vos" 
(la "intelectual" Paula).

"Las alianzas son forma de tener poder y con el poder se gestiona" (el "genio" Roque).

"Vos sos buen cebador de mate y llegás derechito al ministerio" 
(el "lúcido" Hipólito).

"¿Desde cuándo es importante la opinión de los estudiantes?" 
(el "irónico" Hipólito a los jóvenes afines a él).

"Soy básico. Estoy enamorado (de ti)" 
(el "enamorado" Roque a Paula, inmediatamente después de fornicar con la secretaria del local que consiguió para el plenario).

"(Roque) dejó de estudiar por un trabajo conseguido por alguien de la agrupación" (la "sabihonda" voz en off).

"Jugamos al límite, sino no ganábamos. Estuvo bien. Pero es política" (el "gurú" Acevedo al "discípulo" Roque, excusándose de la forata que les dieron a él y a Paula).

"Su verdadero talento está en el manejo de la gente, la táctica y la estrategia, la ejecución y la toma de decisiones, discutir ideas, pensar alianzas, hacerse amigos, dar órdenes, es decir, la política" (la "sabia" voz en off, en el límite del discurso barato).

"Yo no me enojo, no sirve" 
(el "experimentado" Roque antes de vengarse de Acevedo y demostrar, paradójicamente, que sí está enojado).

El gurú Acevedo ensayando mirada varonil

Para saber más:

Presentamos los vínculos a páginas web que dedicaron un espacio a comentar el film que nos ocupa:

Crítica de "El estudiante" (versión extendida).
Representante de la crítica complaciente, panorámica y poco profunda  que inundó la red a raíz del éxito apoteósico de "El estudiante" a nivel internacional. Ideal para los que no ven más allá de una historia de amor simplona mezclada con thriller psicológico y seudomoraleja final, al mejor estilo norteamericano.

Más allá hay dragones
http://elpijamadehepburn.blogspot.com/2012/09/el-estudiante-santiago-mitre-2011.html
Crítica a caballo entre lo estético y lo político, con más peso en lo primero. Observaciones inteligentes y que hacen reflexionar acerca de las virtudes, omisiones, paradojas y exageraciones de "El estudiante".

La cátedra o la vida
Crítica que va más por el lado estético y artístico del film. Analiza sus características visuales, de coherencia del guión, sus alegorías y personajes.

Otra lectura de "El Estudiante"
http://habiaunavezunachica.blogspot.com/2011/12/otra-lectura-de-el-estudiante-de.html
Análisis más de fondo que de forma. Presenta antecedentes históricos que ayudan a comprender mejor el contexto del film. Comparación con otros films argentinos del mismo año (2011). Es la aproximación más crítica a "El estudiante".

El gran éxito cinematográfico


Vox populi: comentan en Youtube
(hemos respetado los comentarios sin corregir los errores de digitación)

1- Excelente pelicula de derecha, una visión de la políitica como uso de las gente en beneficio propio y a partir de la universidad. "Crea" una épica pre kirchnerista, sin pasión, ni entrega, ni ideales. Donde podrías dudar una voz en off te dice "(...) la política (...) una forma de hacer que los demás sigan tus órdenes".Ni el sexo se salva: imposible distinguir lo que se juega en un polvo al paso de una amistad con derecho a roce o un amor más aburrido que conferencia de Rajoy.
romanelunico hace 10 meses

Tenés razón. Yo también pienso que dá una imagen demasiado "negativa" de lo que es la militancia universitaria. Muestra sólo la "rosca" y la militancia universitaria es más que eso...¡por suerte!
darktide2008 en respuesta a romanelunico hace 2 meses

2- Mitre, Ud debería enterarse: , miles de pibes militan con todo fervor las 24 hs y comparten su vida en villas, barrios, sindicatos y universidades con tanta intensidad como la que despliegan al cojer. Claro en el siglo XXI en Argentina, no en los ´90.
romanelunico hace 10 meses

¿este Mitre es pariente del garca director de LA NACIÓN? Si es así, entiendo por qué muestra a la militancia de ese modo tan reaccionario y negativo....
darktide2008 en respuesta a romanelunico hace 2 meses

Chicos esto es una propaganda sin sentido...
Dieguito Quiroga hace 10 meses

de lo mejorcito de la propaganda oficialista!! me gusto, y me parece 100% recomendable.Plata bien gastada...
Francisco Lezcano hace 11 meses

No entendí un choto esta película, pero creo que entendí lo principal, que tampoco es noticia: son todos unos garcas.
MariposaRedimida hace 4 meses

Está bueno el concepto con el que hicieron la película, pero la realidad es otra, por lo menos para el 90% de los estudiantes de ciencias políticas, la mayoría se reciben, si. Pero siempre discuten con argumentos prefabricados y poco elaborados. Son pseudo revolucionarios, idealistas que piensan que ellos solos van a cambiar el mundo, hipocresía pura.
cfacundo2006 hace 4 meses

esta película es del típico caso de los bobos que se van a la facultad a jugar a ser el che guevara y no estudian un carajo , se creen revolucionarios por poner carteles y hacer estupideces y después se transforman en estudiantes crónicos que nunca se reciben .
nanreh93 hace 10 meses

querer una realidad mejor es jugar a ser revolucionario?
Pablo Benjamin Arroyo en respuesta a nanreh93 hace 9 meses

Viste la película? Yo voy a la facultad y es bastante así, puede que un poquitito sobreexagerado, pero es una visión bastante cruda de la realidad, parece casi un documental. Es política capitalista, no es como debería de ser.
solitariocamel hace 1 año